El ebbó del año 2012.

El domingo 8 de enero fue el ebbó del año, la Dra. Maybell Padilla Pérez, secretaria y abogada, quien convoca a la conferencia de prensa de los Sacerdotes de Ifá de la Comisión Organizadora de La Letra del Año, Miguel Febles Padrón, comenta muchos de los momentos de este día tan importante, para quienes siguen con respeto, las predicciones de estos sacerdotes de Ifá.
AC-¿Qué puede usted decir de la concurrencia de creyentes al ebbó?
MP- Ya a las diez de las mañana llegaban mujeres embarazadas, con niños de semanas de nacidos y entre uno y 14 años. ¿A dónde?, al templo Ifá Iranlowo, donde el Awó Òrúnmìlà Víctor Betancourt Ògúndá Ìwòrì iba a realizar el ebbó de la letra del año 2012. ¿La premura? Un año de malos vaticinios, donde peligra la vida de los niños. Más de cincuenta infantes, con sus padres y familiares, estaban presentes. Cerca de doscientas personas esperaban el ebbó.
AC-¿Y cómo fue el comienzo?
MP- Comenzó con la lectura del documento sobre las predicciones de Ifá de la Comisión Organizadora de la Letra del Año Miguel Febles Padrón. Al terminar la misma se preguntó a los presentes sus inquietudes, teniendo en cuenta:
· Signo Regente: Ìrètè Méjì (la sombra del niño de corta vida)
· Oración profética: osobo Iku Otonogua
· Òrúnmìlà oniré
· Divinidad regente; Óyá
· Divinidad acompañante: Ògún.
La primera pregunta fue relacionada con la corta vida en los niños.
La respuesta fue que en el signo Ìrètè Méjì nace el niño abikú, el predestinado por el cielo a tener una corta vida por cumplimentar la de otro que murió sin estar en término celestiales; por ello el ebbó va dirigido a los niños, para que tengan larga vida.
La segunda fue el significado de Ikú Otonogua. Se explicó que el Ikú no venía por orí (cabeza) ni por cuestiones relacionadas con el hombre, sino por designio divino: el cielo, complementando lo del niño abikú, el de corta vida.
AC-¿Se hicieron otras preguntas, relacionadas con algunos de los acontecimientos de interés social que aparecen en las hojas entregadas por la Comisión Miguel Febles Padrón?
MP- Otra pregunta fue si era posible que algún evento meteorológico afectara a Cuba, teniendo en cuenta que la Òrìşà Óyá se relaciona con los vientos y el Òrìşà Şàngó como dador de agua. La repuesta fue que era posible por la combinación Óyá-Şàngó, por ser esta Òrìşà su primera. Se hizo una amplia explicación de los refranes del Odù Ifá y se procedió a comenzar el ebbó.
AC- ¿Algo en especial que quiera usted poner en conocimiento de los lectores, sobre esta jornada especial?
MP- A los mayores les hicieron el relacionado con la historia del dinero congelado. Dice la leyenda que Olódùmaré tenía mucho dinero pero no lo daba al pueblo que lo necesitaba. Las divinidades convocaron al Òrìşà Òrúnmìlà, quien consultó el oráculo y recomendó hacer ebbó con una escalera, carne, maíz y ñame. Las divinidades no lo entendían, pero Òrúnmìlà lo hizo. Los guardianes del dinero eran un perro, un gallo y un carnero, tres que no se cansan de gritar, sobre todo si alguien se acerca.
Le dio la carne al perro y se entretuvo degustándola. Echó maíz al gallo y éste se dedicó a picotearlo placenteramente; al carnero le echó el ñame. En el acto cogió la escalera subió al árbol y obtuvo el dinero que necesitaba la población, la que a partir de entonces tuvo prosperidad. Se hizo este ebbó con cuatro palomas.
AC-¿Y a los niños?
MP- El resto del ebbó fue para los niños. Se dieron 9 carneros a las divinidades relacionadas con el signo. El ebbó de los niños duró horas, porque hay que salvarlos. Llamaba terriblemente la atención que cercanos a las 12 horas de estar en dicho recinto nadie se fuera. Las madres permanecían con sus niños en brazo, o detrás de ellos, quienes, inquietos, jugaban entre sí. Fue una ceremonia bella verlos sentados en el piso haciendo lo que Víctor, Yasmany y el resto de los Awó Òrúnmìlà requerían de ellos. Sentados tranquilos los traviesos como si supieran en su inconsciente que se trataba de algo muy serio y era por su bien.
Cansados todos, a las 9 y media de la noche, terminados el ebbó de los niños, cerraba el de todos con el aguuán (limpieza) de Asojano, para alejar las enfermedades. Solemnemente los presentes se iban limpiando con las miniestras y se iban echando en un recipiente donde metafóricamente se acumulaban y alejaban las enfermedades contenidas en los granos de frijoles de diversas especies, maní, maíz, etc., limpiaban el cuerpo de los presentes.
Años tras años las predicciones de Ifá reflejan el ebbó del signo. Este, además de ser bisiesto, no es bueno. El signo llama a la reflexión, a cuidar el medio ambiente, a la inteligencia, la ética, la salubridad, la limpieza, evitar los conflictos bélicos, la flora, la fauna, los bosques y a tratar de que la vida en la tierra no sea un Apocalipsis a la vuelta de la esquina-dijo para concluir la Dra. Maybell Padilla.