“No me
alcanza la chequera para vivir, cuido el garaje de noche, leo, oigo la radio y
duermo de día porque hay que comer”- dice un jubilado residente en el municipio
capitalino de Plaza.
Los serenos o cuidadores conocidos, en la Cuba
actual como CVP son mal pagados a pesar de la
responsabilidad que tienen quienes cuidan lo ajeno. Un salario mensual
de unos 200 pesos –entre 10 y 12 CUC- el uniforme y algún estímulo (no muy
estimulante) es lo que reciben hombres y mujeres que se dedican a este trabajo.
Los
jubilados no sólo ocupan puestos de seguridad y protección, sino que han
llegado a las escuelas para brindar sus conocimientos como maestros o
profesores, y otros muchos laboran como cuentapropistas.las jubilaciones en
Cuba oscilan entre los doscientos pesos y casi ninguna llega a los trescientos, todas muy bajas y con las
que apenas pueden ayudar a la familia o autofinanciarse.
La Ley
establece que para la solicitud de la pensión ordinaria, los hombres deben
tener como mínimo 65 años cumplidos y 30 de servicios, y las mujeres 60 e igual
tiempo trabajado. ”Quienes soliciten su
jubilación en el período de tránsito, actualmente vigente en la Ley 105 de
Seguridad Social, pueden igual que los
primeros, reincorporarse al trabajo remunerado”.
“En caso de
que lo hagan en el puesto que ocupaban anteriormente, la suma de su pensión y
el nuevo salario no puede exceder el monto salarial que devengaban al momento
de obtener la jubilación. También pueden optar por su reincorporación al
trabajo en cualquier cargo, mediante la solicitud de suspensión de la pensión por edad que perciben”.
La Ley 105
de Seguridad Social en su Capítulo III tiene en cuenta a los que están jubilados
y deciden reinsertarse a un puesto laboral. El Decreto 283 del Consejo de
Ministros, establece el Reglamento de esta Ley para dichos procedimientos. Para
estos casos, la persona debe presentar a la administración, la Resolución que
le otorgó la pensión. Si no la posee puede mostrar entonces, la certificación
expedida por la Filial Municipal del Instituto Nacional de Seguridad Social en
la que aparece el cargo y salario que tenía cuando pidió su jubilación.
Los
pensionados por edad, pueden obtener la pensión y el salario del puesto que ocuparán,
si este difiere del que desempeñaba antes de jubilarse. En casos excepcionales,
los Consejos de la Administración Municipales pueden autorizar al pensionado, a
que ocupe el cargo que realizaba antes, en su centro de trabajo o en otro obteniendo toda su pensión más el salario.
Lo chocante
es que en estos momentos se lleva a efecto un reordenamiento laboral, por lo
que deben ser priorizados los trabajadores que han quedado disponibles,
interruptos, o pertenecen a la reserva laboral y están aptos para laborar en
dichos puestos.
Los
pensionados que logran reincorporarse pueden optar por el cobro de subsidios
previstos para los casos de enfermedades o accidentes por un término de hasta
seis meses; y pueden incrementar su pensión, a partir del período en que
trabajaron después de pensionados.
“Una tarde
llegaron a mi casa para proponerme que me incorporara de nuevo a mi profesión.
No han conseguido a nadie que pueda hacer ese trabajo bien; no sé siempre
trabajé con disciplina y honestidad, nada más. Empecé de nuevo porque no me
hallaba en la casa, sentía que molestaba, que no era útil. Además una pensión
es muy inferior a un salario”-comenta un septuagenario con más de 40 años de
trabajo antes de pensionarse.
Son varias
las entidades que han tenido que reinsertar a sus pensionados para lograr
eficiencia y productividad. Dirigentes de empresas como la Agencia Alfa Romeo
del sector del transporte en la capital reconocen el desempeño de los jubilados
de su centro quienes aportan sus experiencias a los nuevos trabajadores. Los
detalles de cada marca y modelo de auto sólo se consiguen con la experiencia de
los años, opinan jubilados entrevistados.
A pesar de
Decretos, Leyes y Reglamentos que aseguran flexibilidades con aristas positivas
para reintegrar a los pensionados que lo
deseen, aún quedan muchas situaciones sin solución inmediata para una gran
cantidad de personas capacitadas y con experiencia laboral que no admiten
reubicarse en puestos que nada tienen que ver con su profesión, y suelen acudir
a las entidades conocidas como bolsas de trabajo donde casi nunca encuentran
sus aspiraciones.
FUENTES.
Emplear prudencia y sabiduría por Ivette
Fernández Sosa. Granma 27 de junio de 2012.
Cultores de la experiencia por
Ángeles Muik. Trabajadores Nacionales/03 25 de junio de 2012.
No hay comentarios:
Publicar un comentario